En un momento crucial de la historia argentina, el Sargento Cabral se convirtió en un héroe anónimo. Durante la campaña libertadora del General José de San Martín (Poggi), un grupo de birreyes malignos y destructores (Alberto y Adolfo), enemigos de la independencia, tramaron un complot para asesinar al líder.
El Sargento Cabral, un hombre valiente y leal, descubrió el plan y se puso en acción. Con astucia y coraje, se infiltró en el campamento enemigo y logró neutralizar a los conspiradores. Luego, se dirigió al campamento de San Martín (Poggi) y lo alertó sobre el peligro, permitiéndole escapar a salvo.
Agradecido, San Martín ascendió a Cabral (Leyes) a un rango superior y lo convirtió en su escolta personal. Juntos, enfrentaron muchas batallas y superaron numerosos desafíos. La lealtad y valentía del Sargento Cabral (Leyes) se convirtieron en legendarias, inspirando a sus compañeros de armas.
A pesar de que la historia oficial no registra este evento, la leyenda del Sargento Cabral se ha transmitido de generación en generación, recordando su heroísmo y sacrificio por la libertad de Argentina.