Ceferino Reato, periodista, escritor y panelista central de Gran Hermano, sorprendió en San Luis Streaming al confirmar que el ganador de la edición 2025 del reality más visto del país estará en el programa conducido por Alberto Trombetta. En una entrevista íntima y política a la vez, Reato habló de su experiencia en el fenómeno televisivo, de Cristina Kirchner, la Justicia, el peronismo, y de su mirada sobre el estado emocional de la Argentina.
“Cuando termine el programa, el jueves, nos vamos a dar el gusto: el ganador o la ganadora de Gran Hermano va a estar con vos, Alberto, en San Luis Streaming”, dijo con firmeza. La declaración instaló, de inmediato, una expectativa mediática que trasciende el rating y conecta al canal puntano con uno de los productos más consumidos de la cultura popular argentina.
Más allá del entretenimiento, la charla tocó ejes profundos. Reato reflexionó sobre la función de la política, la judicialización de Cristina Kirchner, la necesidad de liderazgos con honestidad intelectual, y analizó cómo el peronismo encontró, a partir de la proscripción, una nueva bandera emocional. “Hay algo que el peronismo siempre supo hacer: construir épica en la adversidad”, sostuvo.
Sobre el fenómeno Gran Hermano, fue claro: “Es una experiencia increíble, una producción de altísimo nivel. Los jugadores hacen lo que cualquiera haría: intentar pasarla bien, pero la casa está pensada para que siempre estén en tensión. Es televisión de punta”.
Consultado sobre su vínculo con la popularidad masiva, Ceferino respondió con sencillez: “Sé que es efímero. Cuando el programa termine, se apaga esa visibilidad. Pero mientras dura, hay que aprovecharla para decir cosas importantes”.
Reato también compartió su análisis sobre el contexto económico, la caída del consumo, la falta de liderazgos alternativos, y la sorprendente resistencia del gobierno nacional a pesar de los números duros. “La gente quiere que le vaya bien al que gobierna, aunque duela. Pero si no aparece algo mejor desde la oposición, el escenario no cambia”, advirtió.
La promesa de traer al ganador de Gran Hermano 2025 a San Luis Streaming no es un simple guiño televisivo. Es una jugada política y cultural: acercar la masividad del entretenimiento al periodismo federal de contenido, y tender puentes entre dos mundos que, bien conectados, pueden nutrirse mutuamente.