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El histórico dirigente peronista cuestionó duramente el rumbo del gobierno nacional, habló de la decadencia del poder estadounidense, criticó la ausencia de una oposición sólida y apuntó contra Cristina Kirchner como un obstáculo para el surgimiento de un nuevo liderazgo.
En una entrevista concedida al programa conducido por Alberto Trombetta en San Luis Streaming, el analista político y dirigente peronista Julio Bárbaro volvió a mostrar su mirada aguda y sin concesiones sobre el escenario nacional e internacional. Con la claridad que lo caracteriza, sostuvo que el gobierno de Javier Milei ya «terminó», aunque reconoció que aún se sostiene por la falta de una alternativa política concreta.
“Estamos viendo la retirada de Estados Unidos del poder mundial. Ya no pueden sostener el lugar que ocuparon durante décadas”, afirmó Bárbaro, haciendo referencia al reordenamiento geopolítico global. En ese contexto, consideró «absurdo» que la Argentina haya apostado por una alianza cerrada con una potencia en decadencia. “Siempre fuimos antiyanquis, y justo cuando se están hundiendo nos abrazamos a ellos. No sabemos si nos equivocamos o si nos estamos hundiendo con ellos”, ironizó.
Respecto a la situación local, Bárbaro no dejó dudas sobre su diagnóstico: “Milei ya terminó. El problema es si la sociedad es capaz de construir una alternativa válida”. Para el exdiputado nacional, el principal escollo en esa reconstrucción es la permanencia de Cristina Fernández de Kirchner en la escena pública. “Mientras Cristina siga, es imposible. Ya lo dije muchas veces: el miedo a que vuelva es lo que sostiene a este presente patético”.
Bárbaro se refirió también al fallido intento del gobierno de aprobar el ingreso de jueces afines a la Corte Suprema como un síntoma de la creciente debilidad política de la administración de La Libertad Avanza. “Pasaron de la soberbia a ser simples aficionados al desnudo. No lograron ni siquiera lo que creían garantizado”, aseguró.
Finalmente, lamentó la oportunidad perdida de integrar el bloque de los BRICS —el grupo de países emergentes con mayor proyección internacional—, una decisión que definió como un “despropósito geopolítico”. “Desaprovechamos una posibilidad histórica y nos abrazamos a un Estados Unidos que se hunde en soledad”, concluyó.
En un mundo que se reconfigura y una Argentina que busca un rumbo, las palabras de Julio Bárbaro suenan como una advertencia: la crisis no es solo del gobierno, también es de la política toda, que aún no logra ofrecer respuestas.
