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La vecindad está alborotada por una serie de medidas adoptadas por el Juez Federal (subrogante) Juan Carlos Nacul en el marco de una vieja denuncia -datada en 2021- contra el gobernador Claudio Poggi, expediente que dormía -plácidamente- en algún apartado cajón del Juzgado Federal de la ciudad de San Luis, cuyo juez natural, Dr. Juan Esteban Maqueda, previamente se habíaexcusadode intervenir.
Más de uno anda con los ojos como el dos de oro -hasta el propio denunciante, el abogado, exlegislador provincial y empresario periodístico Gustavo Reviglio- al enterarse de estas casi curiosas novedades que han sorprendido a propios y extraños.
Este viejo justiciero enmascarado se ve obligado a trazar una semblanza del intrépido abogado tucumano Nacul, por ser persona de su conocimiento.
En primer lugar hay que decir que llegó a estas tierras mediterráneas por azar, o no tanto. Don Nacul casiaccedió al cargo de juez federal N°2 de la provincia de Jujuy para el que había concursado, pero en dicha ocasión no pasó el “filtro” del Senado de la Nación. DiversasONGs de Derechos Humanos impugnaron su nombre, alegando que fue multifuncionario de la última dictadura en Tucumán, su evidente conexión con el bussismo, su calidad de defensor del “Malevo” Ferreyra y, como si fuera poco, su conocida militancia “carapintada”. Nacul, al final, optó por renunciar a dicha postulación. El exsenador nacional puntano Daniel Pérsico fue uno de sus más firmes objetores en aquel momento.
Luego concursó para el cargo que actualmente ocupa y, parece, la distancia acudió en auxilio del olvido y sus “pecados” se perdieron en el periplo, “total en Mercedes nadie lo conoce”.
Una por demás llamativa curiosidad que tiene en común con el presidente Javier Milei es que ambos han sido -o son- cercanos al entorno del genocida tucumano Antonio Domingo Bussi, lo que hablapor sí mismo de su perfil ideológico. DonNacul ocupó numerosos cargos públicos en Tucumán[1], antes y después de la dictadura, gracias a sus vinculaciones bussistas.
Esto daría para derramar océanos de tinta, pero prefiero resumir diciendo que los jueces no son ingenuos, saben perfectamente que, con sus decisiones, también hacen política y, en este caso, la investigación contra Poggi tiene un único beneficiario y/o interesado: Alberto I, El Derrotado (y su extensa familia).
Z+
