La psico-política del neoliberalismo: Walter Magallanes analiza el poder de las emociones y la Inteligencia Artificial

La psico-política del neoliberalismo: Walter Magallanes analiza el poder de las emociones y la Inteligencia Artificial

Por Gustavo Thompson

En una charla con La Línea, profundamente analítica y reveladora, Walter Magallanes, consultor internacional en neuro-política y director de Neuroiberia, explicó cómo el neoliberalismo utiliza la Inteligencia Artificial (IA) para consolidar su control a nivel global. Desde la explotación de la libertad individual hasta la manipulación emocional masiva, Magallanes abordó el impacto de la psico-política en el sistema contemporáneo y en la toma de decisiones, especialmente en el ámbito político.

El neoliberalismo: el dominio de la libertad como herramienta de control

Magallanes describió al neoliberalismo como una mutación del capitalismo que explota la libertad para convertir a los individuos en empresarios de sí mismos, bajo un sistema de autoexplotación. “Hoy, cada persona se responsabiliza de su propio éxito o fracaso, generando un ciclo de auto-agresión y culpa. Esto fragmenta cualquier resistencia social y refuerza la estabilidad del sistema”, destacó.

Según el experto, la psico-política utiliza herramientas avanzadas, como la IA, para personalizar la experiencia de cada individuo y dirigir su voluntad hacia los objetivos del sistema neoliberal.

La IA: el nuevo panóptico digital

En lugar de centrarse únicamente en el Big Data, Magallanes profundizó en el impacto de la Inteligencia Artificial, una tecnología que ha revolucionado el análisis y la predicción del comportamiento humano. “La IA no solo recopila datos; los procesa, los interpreta y actúa sobre ellos en tiempo real, anticipándose a nuestras decisiones antes incluso de que las tomemos”, explicó.

La IA ha convertido el antiguo concepto del “panóptico” en un modelo digital más efectivo y sutil. Mientras que en el pasado se necesitaba vigilancia explícita, hoy los usuarios de redes sociales y aplicaciones móviles se autoexponen voluntariamente, entregando información sobre sus emociones, comportamientos y preferencias sin percibir el alcance de su vulnerabilidad.

“Ya no vivimos bajo una supervisión directa, sino bajo un sistema en el que nos desnudamos emocionalmente por elección. La IA convierte estos datos en herramientas de manipulación, moldeando nuestras decisiones sin que seamos conscientes de ello”, enfatizó Magallanes.

La neuro-política y la manipulación emocional

Un eje central de la charla fue cómo la IA permite segmentar y personalizar mensajes políticos, utilizando las emociones como herramienta de persuasión. “El voto ya no es una decisión racional; es un gusto emocional. La IA analiza y predice nuestras reacciones, diseñando mensajes que resuenan con nuestros miedos, deseos y anhelos más profundos”, sostuvo.

Magallanes destacó cómo la IA fue utilizada en campañas como la de Donald Trump en 2016, donde su equipo empleó microsegmentación basada en datos emocionales para ganar apoyo en estados clave. “Mientras los métodos tradicionales de campaña fallaron, la IA permitió construir narrativas personalizadas que conectaron con el inconsciente colectivo, inclinando la balanza a favor de Trump.”

El futuro: de la IA a la biotecnología

En su visión futurista, Magallanes anticipó un mundo donde la Inteligencia Artificial se integrará con la biotecnología para monitorear y controlar no solo nuestras acciones, sino también nuestros pensamientos y emociones. “Nos dirigimos hacia un sistema donde nanorobots y sensores biométricos no solo nos mantendrán saludables, sino que también informarán a la IA sobre nuestros estados emocionales y psicológicos. Este nivel de control plantea serios desafíos éticos y sociales.”

La evolución hacia un sistema de inteligencia emocional artificial podría, según Magallanes, anular el concepto de libertad personal, ya que las decisiones individuales serán moldeadas por algoritmos diseñados para anticipar y manipular cada acción.

Conclusión: emociones, IA y política

En un cierre contundente, Magallanes enfatizó que el neoliberalismo utiliza la IA no solo como una herramienta tecnológica, sino como un dispositivo de dominación emocional. “El poder ya no se ejerce con represión, sino con seducción. La IA no nos obliga a nada; nos hace creer que elegimos libremente, mientras dirige nuestras acciones hacia los objetivos del sistema.”

Magallanes advirtió que las próximas elecciones no se decidirán por ideas o propuestas, sino por quién controle mejor las emociones colectivas a través de la IA. “La política ya no se trata de persuadir con argumentos, sino de resonar emocionalmente con el electorado. El que domine esta técnica, ganará la guerra de las emociones.”

Con un mensaje claro, Walter Magallanes dejó a La Línea con una reflexión inquietante: “La inteligencia artificial no solo define nuestro presente, sino también nuestra percepción del futuro. Y en este futuro, la libertad puede ser el mayor sacrificio en manos de un sistema que lo controla todo, incluso nuestras emociones.”

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