Al cumplirse un año de gestión al frente de la Secretaría de la Discapacidad del Gobierno de San Luis, su titular, Luis Marcelo Giraudo, emitió un video de agradecimiento en el que destacó las atenciones y respeto de los intendentes de toda la provincia, el trabajo conjunto con los equipos locales y, sobre todo, la confianza depositada en él por el gobernador Claudio Poggi para liderar este organismo clave y único en la política social de San Luis y la Argentina.
En su mensaje, Giraudo recordó que la creación de la Secretaría de la Discapacidad fue un sueño hecho realidad, un anhelo que por años estuvo postergado y que finalmente se concretó bajo la gestión de Poggi. “En San Luis los sueños se cumplen en manos del gobernador Poggi”, enfatizó, reconociendo el liderazgo del mandatario en la concreción de políticas inclusivas para las personas con discapacidad.
Un mensaje con proyección política
Pero el mensaje de Giraudo no solo fue un balance de gestión, sino que también dejó una clara señal política de cara a las elecciones legislativas del presente año. En un gesto de lealtad y disciplina política, ratificó su respaldo absoluto a Poggi, dejando en manos del gobernador la decisión sobre la conformación de las listas para los comicios venideros.
Esta declaración no es menor: Luis Giraudo se ha consolidado como una figura con personalidad, ejecutividad y una inagotable vocación de trabajo. En plena estación estival, cuando muchos dirigentes políticos se toman un descanso, él sigue recorriendo los parajes más alejados de las ciudades principales, enfrentando altas temperaturas y dialogando con la gente para seguir conociendo de cerca sus necesidades.
Las tensiones internas y los obstáculos en Villa Mercedes
Sin embargo, no todo es reconocimiento y respaldo dentro del oficialismo. Villa Mercedes se ha convertido en el epicentro de las resistencias contra la gestión de Giraudo, y no precisamente desde la oposición, sino desde sectores internos del poggismo. Todo indica que Giraudo se impone sobre algunos referentes locales del propio gobernador, y en lugar de competir con él a través de acciones concretas en beneficio de la sociedad, algunos intentan hacerlo mediante golpes bajos.
Uno de los episodios más llamativos en este contexto es la aparente negativa a que Giraudo se reúna con el intendente de Villa Mercedes, Maximiliano Frontera. Si bien Frontera es un aliado estratégico de Poggi, sectores internos han intentado instalar la idea de que un acercamiento entre ambos representaría un conflicto político. Giraudo, lejos de caer en la confrontación, ha manifestado públicamente su lealtad a Poggi y su alineamiento con la conducción del gobernador, desmintiendo cualquier intención de desafiar su liderazgo.
¿Quién pone trabas al diálogo?
Las tensiones internas dentro del oficialismo provincial han comenzado a llamar la atención. Si bien Poggi ha demostrado una conducción firme y clara, algunos actores dentro de su espacio parecen más interesados en disputar espacios de poder que en trabajar por el bienestar de la sociedad. El hecho de que se intente bloquear un simple café entre Giraudo y Frontera demuestra que hay “manos negras” operando en las sombras, con la intención de instalar conflictos que no existen.
En este escenario, la figura de Luis Marcelo Giraudo sigue fortaleciéndose, no solo por su gestión en la Secretaría de la Discapacidad, sino por su capacidad de sostenerse firme ante los intentos de desgaste. La gran incógnita es si el gobernador Poggi tomará cartas en el asunto para ordenar su propio espacio y evitar que las disputas internas terminen por debilitar un proyecto de gobierno que ha demostrado tener un fuerte respaldo popular.
En San Luis, los sueños se cumplen con trabajo y compromiso. Pero también con claridad política.